Bitcoin es una moneda virtual o un medio de intercambio electrónico que sirve para adquirir productos y servicios como cualquier otra moneda. Pero esta moneda es descentralizada, es decir que no existe una autoridad o ente de control que sea responsable de su emisión y registro de sus movimientos. Consiste en una clave criptográfica que se asocia a una billetera virtual (Wallets), donde puedes recibir y efectuar pagos, muy similar a una cuenta bancaria en su funcionamiento. Sin embargo, posee los beneficios de la criptografía, es decir ninguna entidad o tercero puede acceder a ellas dado que su propietario es el único poseedor de las claves, lo que significa que eres tu propio banco, por lo tanto, los costos de transacción son reducidos significativamente.
Una vez que la transacción se efectúa, esta es replicada en toda la red de computadores de manera que ya no la puedas modificarla, puesto que para hacerlo tendrías que modificar la transacción en todos los ordenadores. Esto hace que cuanto más grande sea la red de Bitcoins más seguras sean sus transacciones.
Para entender el Bitcoin hay que entender un par de conceptos básicos. El primero es que se basa en una red de computadores descentralizada, lo que suponen diferentes computadores repartidos por todo el mundo con copias de todas las transacciones que se han realizado. El segundo concepto es el de los mineros, personas que forman parte de esta red de computadores, los cuales registran y verifican las transacciones en bloques de información, teniendo como incentivo en contraparte, fracciones de Bitcoin. El tercer concepto importante es el de las Exchange, que te permiten cambiar dinero como los euros o los dólares por Bitcoins u otras criptomonedas, es decir es como una casa de cambio, pero virtualmente.
Es de extrema importancia resaltar la configuración avanzada de Bitcoin con respecto al dinero tradicional, por lo cual la cantidad de criptomonedas que se emiten cada año está configurada en su algoritmo, para que cada cuatro años se reduzca a la mitad la cantidad que se producen, y sólo se emitirán un total de 21 millones de Bitcoins. Esto es una diferencia fundamental con las monedas convencionales, puesto que los bancos emiten dinero de acuerdo a su libre albedrío. Esto le da más capacidad de generar valor frente a unas monedas que pueden devaluarse cuando los bancos así lo deseen.
La forma más fácil de explicar Blockchain, es tener presente que es cómo un libro contable el cual es abierto, inmutable y distribuido entre varios computadores de una red. La Blockchain o cadena de bloques es la tecnología que respalda a Bitcoin, y se puede separar de él para explotar su potencial. Por ejemplo, sirve para crear otras criptomonedas que se basen en los mismos principios, pero que tengan otras propiedades al haber sido cambiado el algoritmo o la política monetaria. Y eso es precisamente lo que ha sucedido, creando nuevas criptomonedas.
Entre ellas surge otra blockchain llamada Ethereum. Su diferencia es que no se dedica únicamente a almacenar transacciones de monedas, sino a otro propósito más genérico, como la ejecución de aplicaciones descentralizadas que no necesitan un servidor central.
El Blockchain también se puede utilizar para crear otros tipos de representación de valor. Es lo que se conocen como Tokens. Estas pueden ser criptomonedas, pero también lo que se conocen como tokens de utilidad, que son básicamente los que puedes usar dentro de un ecosistema para participar en un servicio o utilidad. Un ejemplo son los casinos, donde compras tus propios tokens o fichas que luego puedes utilizar en sus máquinas y restaurantes.
En la anterior clasificación cabe acuñar la criptomoneda, Binance coin, moneda nativa del Exchange de Binance, el Exchange más importante mundialmente, la cual creó en principio su propia criptomoneda impulsada por su misma funcionalidad en el ecosistema. Sin embargo, ha evolucionado en la misma senda de Ethereum para convertirse en una plataforma donde puedan generarse proyectos por medio de contratos inteligentes.
Y luego tenemos los security tokens, que son representaciones digitales de activos electrónicos. Son como las acciones, pero que se emiten de forma digital en vez de un papel como suele hacerse convencionalmente. Esto se puede aplicar también a la tokenización de edificios, arte y muchas otras cosas.
Un ejemplo de la tokenización, se puede encontrar en el arte a través de los NFTs, o los tokens no fungibles. Los NFTs son aquellos que se pueden identificar y distinguir de forma única durante su interacción y circulación. La tecnología blockchain proporciona un método para registrar la propiedad de los activos digitales de forma transparente y resistente a la modificación en la cadena de bloques. Por consiguiente, los tokens no fungibles son activos únicos, verdaderos y trazables, validando así, su valor en el mercado de arte y coleccionables.
Ahora hablemos un poco del tema finanzas descentralizadas o comúnmente denominadas como DeFi. En resumidas cuentas, DeFi es una solución basada en la tecnología blockchain que busca ofrecer soluciones abiertas y flexibles como alternativa al sistema financiero. Es un ecosistema donde se pueden construir herramientas y servicios financieros de manera descentralizada.
Dicho ecosistema está construido sobre la cadena de bloques de Ethereum y Binance Smart Chain. Los desarrolladores pueden programar aplicaciones que pueden crear, almacenar y administrar activos digitales (tokens). Para que el sistema funcione, se programan y construyen contratos inteligentes y aplicaciones descentralizadas DApps. El vencimiento de estos contratos y acuerdos se aplica automáticamente si la cadena de bloques recibe los datos correctos. De esta manera se pueden realizar acuerdos complejos e irreversibles sin la necesidad de un intermediario.
Cabe resaltar las diferencias entre las FinTech y el mundo DeFi. A pesar de que ambas se basen en la tecnología para ofrecer servicios financieros que faciliten y simplifiquen los procesos convencionales, es importante resaltar que las FinTech son centralizadas y buscan agilizar las operaciones económicas basando su operatividad en plataformas de tecnología financiera de innovación en el mercado. Mientras que las aplicaciones DeFi son totalmente libres y descentralizadas, no se encuentran sujetas a leyes gubernamentales y permite la interacción directa entre las personas que van a llevar a cabo diversos intercambios financieros y como mencionamos anteriormente apoyándose en la tecnología blockchain y los contratos inteligentes.
Los Exchanges descentralizados es una de las aplicaciones DeFi más reconocidas y con mayor impacto tecnológico a la fecha. En esta plataforma se pueden intercambiar criptomonedas por dinero Fiat o por otras criptomonedas y el valor de estas está determinado por la oferta y la demanda del mercado. Este desarrollo es una evolución de un Exchange tradicional, donde todo el funcionamiento se traslada a la blockchain en donde potentes contratos inteligentes lideran la operación. Esto elimina los intermediarios en gran medida y hace estos tipos de Exchange más seguros y transparentes. Los fondos no recaen en una figura central, y por ende los usuarios del Exchange descentralizado mantienen en todo momento el control de sus activos.
Las criptomonedas no solo son una tecnología revolucionaria que está en sus primeros años, también se ha convertido en un mercado bursátil, donde brinda rentabilidades importantes a sus usuarios, por lo anterior es importante hablar del trading en criptomonedas.
El trading es una actividad especulativa que consiste en la compraventa de activos cuyo valor es determinado por la oferta y demanda del mercado. Dicha actividad se puede realizar en los exchanges descentralizados, donde se pueden adquirir los criptoactivos, almacenarlos en tu wallet personal y de esta manera comenzar a operar en el mercado.
Existen diferentes tipos de trading y están categorizados de acuerdo al tiempo en el que se mantienen abiertas las operaciones:
Day Trading: El inversionista abre y cierra operaciones dentro del mismo día de negociación. Es una forma de invertir y obtener ganancias a corto plazo.
Scalping: El inversionista opera en periodos muy cortos a lo largo del día también, pero las operaciones pueden durar segundos.
Swing Trading: En esta modalidad las operaciones suelen durar más tiempo aproximadamente 10 días e incluso semanas.
Trading tendencial o tipo Inversionista: Este tipo de trading no tiene límite temporal, consiste en tomar posiciones en el mercado a favor de la tendencia con el fin de obtener ganancias a largo plazo.
Ahora bien, ya que conocemos los tipos de trading, entraremos al maravilloso mundo del análisis técnico y los conceptos básicos para comenzar a operar. El análisis técnico es el estudio de los movimientos del mercado, principalmente mediante el uso de gráficos, con el propósito de pronosticar las futuras tendencias de los precios.
(Imagen extraída de Tradingview)
En la imagen observamos el gráfico de BTC versus USDT (dólar estadounidense) y como ha sido la variación del precio desde F
(Imagen extraída de Tradingview) Febrero del 2021 hasta la fecha actual 4 Agosto de 2021.
Cada vela japonesa representa el movimiento del mercado diario y de cada vela podemos extraer el precio más alto que alcanzó en determinado día, el precio mínimo y el precio de apertura y cierre. De esta forma, se generan los gráficos y se refleja el comportamiento del mercado.
A través de las velas japonesas se puede apreciar el comportamiento inmediato del precio y existen indicadores técnicos que nos pueden facilitar esta tarea. Entre los más importantes encontramos a las Ondas de Elliot y los retrocesos de Fibonacci.
No entraremos muy en detalle en el análisis técnico y las velas japonesas en este artículo ya que dedicaremos para cada tema un apartado personalizado. Sin embargo, si deseas saber un poco más de este tema puedes entrar a nuestro sitio web, donde encontrarás material educativo que te podrá ayudar a profundizar en el mismo.
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